viernes, 5 de agosto de 2011

A propósito de descontento popular

Muy lamentable lo que esta ocurriendo en nuestro país,  esto es como la crónica de una muerte anunciada.


La sociedad  civil, por llamarla de  algún modo, esta  desencantada de la política y de los actores políticos, al parecer no solo es un tema de inequidad, sino es una crisis profunda del sistema político actual como lo vemos y como está diseñado…
 Y a el movimiento de los pingüinos nos señalaron que la juventud  que aparentemente no esta ni ahí, si lo está  y se sienten empoderados mucho más que otros actores de la sociedad para realizar estos cambios.
 Pero ¿cómo hacer estos cambios? si los problemas de nuestra sociedad, no se debaten ni discuten con la gente, ni menos se hace lo que ellos desean y quieren, ya que tenemos un sistema político presidencialista, donde las leyes se ven en el congreso a requerimiento del presidente, que “olfatea” lo que la sociedad quiere a través de sus ministros e intendentes y ahora las encuestas,  pero siempre pensando en dar solución a los problemas solo desde la perspectiva de lo que “aparentemente” quiere la mayoría…
Luego los parlamentarios  elegidos por el voto popular en un sistema además poco representativo, el binominal, pero además para elegir  entre solo algunos representantes que son “buenos candidatos” cuya elección habitualmente la gente desconoce (eso sin hablar de las campañas y su financiamiento).
Entonces ¿Qué y a quienes representan estos candidatos? no se entiende mucho, porque los partidos políticos, base del sistema político actual, tienen muy pocos miembros en sus filas… 
Es por esta razón que a la hora de votar leyes y legislar, están tan alejados de lo que la ciudadanía requiere…
Esto explica en parte el gran descontento popular y este gran rechazo al poder político  y  no es tema de que lo políticos se “unan” solamente como dice un Ministro por ahí, por que  pueden unirse y sacar un  agenda  legislativa (Un ej. es el AUGE, allí todos unidos aprobaron migajas para la salud que continúa mal), pero no es solo eso lo que los ciudadanos quieren, al parecer desean mayor equidad, “educación gratis” gritan, se siente agobiados por un sistema restrictivo, donde solo algunos se llevan la tajada del león… 
Les pongo un ejemplo, las carreteras concesionadas de Antofagasta a Mejillones  y a Calama;  no es que yo este en contra de eso, creo que serán un gran aporte, pero pienso que debió no solo socializarse, sino consultarle a la ciudadanía organizada si ese proyecto es necesario y prioritario, además si ¿Debe cobrase o no?  Y  ¿Por qué?.  Muchos  ciudadanos  de esta región preguntan: ¿Si se subvenciona el Transantiago con dineros de la gran minería del cobre?, ¿Por qué no subvencionar las carreteras concesionadas de la región de Antofagasta?
  A lo mejor si se hubiese debatido y explicado muy bien el tema habríamos logramos el mismo resultado, aunque no lo creo en este caso. Pero si se evitaría la gran  inconformidad de  los ciudadanos, porque ellos habrían  formado parte de la decisiones… o de su  prioridazación.
  Los técnicos explican y proponen, así  la ciudadanía decide que es mejor y que va primero.

En varias oportunidades he propuesto que se haga  un “banco” de ideas y proyectos para   socializarlos y recibir nuevas propuestas para proponérselos a los ciudadanos que se pronuncien  en un plebiscito comunal priorizando estos proyectos (no he sido escuchado).

En el sistema político “deberían” recogerse las propuestas de los ciudadanos a través de las comunidades organizadas, donde las necesidades y prioridades  se debatan. Con el fin  de que de la propia comunidad salgan las soluciones o  analicen estas  soluciones propuestas por los gobiernos, para  conocerlas, aceptarlas, mejorarlas, modificarlas o rechazarlas.

También debería ocurrir así con las elecciones de representantes al Congreso, pienso que también los intendentes y gobernadores deberían ser por elección popular a instancias de la comunidad organizada.
 Creo que sin ser un experto en materias legales, ni políticas, la ciudadanía pide a “gritos” ser escuchada  y realmente  necesitamos un cambio “democratizador”  donde los temas se discutan en las bases ciudadanas y de allí concensuadas suban al Congreso, perfeccionadas y propuestas por el ejecutivo.

Estos mismos temas de cambio político, fin al binominal y otros, deberían ser propuestos y analizados por la comunidad organizada e a través de  todo el país, antes de formular una propuesta de reforma al sistema político 

Mis saludos y mis respetos
 Dr. Hugo Benítez                  


3 comentarios:

Perro dijo...

Acá está muy claro http://www.elmostrador.cl/opinion/2011/08/05/educacion-pinera-no-es-el-profeta/

Saludos

Horacio dijo...

Este es el resultado del descalabro educacional que empezó con la reforma de 1968 (gobierno de Eduardo Frei Montalva). Los estudiantes que hoy protestan son hijos de los jóvenes que crecieron con esa formación, en la cual se desacreditaron todos los valores cívicos y morales que inculcaban los grandes liceos y colegios : fraternidad, esfuerzo, superación, trabajo, raciocinio, diálogo, tolerancia, respeto, y tantos otros que hicieron de Chile un país ejemplar en su democracia y civismo, con partidos políticos que eran un referente de opinión, con posturas realistas y positivas para el desarrollo de la sociedad.

¿ Qué nos pasó, como país, que no fuimos capaces de seguir en esa senda, en lugar de creer ingenuamente en el milagro prometido por decadentes ideologismos foráneos ?

Los diecisiete años de dictadura fueron la consecuencia trágica de esa situación; no fué un castigo, pues los principales pregoneros responsables se fueron, por distintos caminos, a disfrutar del apoyo que sus partidos les ofrecieron para usufructuar de institutos, academias y universidades varias. La dictadura la sufrimos los que nos quedamos en Chile, luchando, trabajando o simplemente soportando para que ella terminara.

El desmantelamiento de las estructuras docentes, cambios estructurales y sobre todo, la perversión valórica generalizada en el período de la dictadura, es lo que hoy estamos viviendo.

Es una realidad que hay deficiente infraestructura material.

Es una realidad que hay profesores humillados por sus sueldos miserables y menospreciados por la sociedad, y que han dejado de ser los profesionales queridos y respetados que eran hace 40 años atrás.

Es una realidad que hay corrupción y mal uso de recursos.

Es una realidad que hay liceos y colegios destruidos por vándalos, la mayoría parte de su propio alumnado.

Es una realidad que hay grandes diferencias entre los resultados de la educación gratuita y la educación pagada.

Es una realidad vergonzosa que estudiantes meritorios no puedan estudiar por falta de recursos.

Es una realidad dramática que hay familias con endeudamiento impagable para que sus hijos puedan estudiar.

Es una realidad histórica que desde el 11 de marzo de 1990 hasta el 11 de marzo de 2010 han pasado los presidentes Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet, en total 20 años; tiempo más que suficiente para haber generado los cambios requeridos urgentemente por la educación chilena.

Es una realidad que el gobierno actual heredó un problema originado en una generación anterior, del cual no es culpable.

Es una realidad que esta necesidad ciudadana requiere urgentemente una solución originada en el diálogo, algo tan olvidado.

Es una realidad que los mismos instigadores que condujeron a la crisis de 1973, están hoy detrás de los actos de presión.

Es una realidad que debemos evitar que el odio y la desconfianza sigan minando nuestro ser.

Aprovechemos las instituciones existentes y desde el interior de ellas transformenos nuestro país; modifiquémoslas si es necesario, recordando siempre que el voto ciudadano es el ejercicio del derecho y deber de participar en el gobierno de la nación. Para eso están las juntas de vecinos, concejos comunales, parlamento, presidente.

Aprendamos de los errores del pasado, para no repetirlos.

Sigamos soñando y creyendo en un Chile más justo y solidario.

viviana dijo...

muy buena la nota Dr. Hugo Cesar Alberto Benitez Caceres, si todos los politicos fueran justos, correctos y velaran por el bien de las personas, todo seria diferente y la gente no se revelaria.