Estimados
vecinos, mi afán no es polemizar con ningún empresario, ni portuario, menos
ofender a determinadas personas, sin embargo ha llegado el momento de decir “basta”. El colegio
médico ha solicitado a la autoridad sanitaria que realice una fiscalización al
puerto Antofagasta y también ha tomado muestras, porque tiene la certeza de que
allí no se cumple la precaria normativa medio ambiental chilena, ni con los
trabajadores, ni con la comunidad. Eso ya es más que evidente,
tanto que el propio Diario El Mercurio ha hecho
mediciones de los contaminantes frente al puerto y ha demostrado
que los niveles de los diversos
contaminantes están muy elevados . Ante estos graves hechos
cualquier empresario con dignidad y mínima ética, bajaría los brazos y
reconocería la catástrofe medio ambiental a la que tienen sumida a la ciudad de
Antofagasta, con sus malas prácticas y poca rigurosidad en los “protocolos” de
transporte, embarque y desembarque de
concentrados de minerales, que además son insuficientemente fiscalizados por
las autoridad sanitaria y medio ambientales; que rayan en la negligencia.
Sinceramente creo que en estas condiciones el puerto de Antofagasta debería ser
cerrado por las actuales autoridades, hasta que nos aseguren que las cargas y descargas a través de este puerto
sean realmente seguras.
¿Qué nos hace diferentes?
Es lamentable y patético ver como algunas personas, dentro de su ignorancia o peor aún, por “intereses creados”, están dispuestos a defender lo indefendible. Entiendo perfectamente que las empresas y entre ellas la empresa portuaria está convencida que sus instalaciones son las mejores del planeta y aseguren a todos que no contaminan, pero la evidencia encontrada en el caso del puerto de Antofagasta, demuestra que es todo lo contrario. Además en ninguna parte del país se trasladan y embarcan concentrados de minerales con contaminación “cero” o sin impacto medio ambiental. Entonces: ¿Por qué hacerlo por la ciudad más poblada del norte grande; sacrificando la salud de la gente por generaciones, como la herencia que nos ha dejado el arsenicismo del agua entre los años 56 al 70???
Algunos, le echarán la culpa al cigarrillo de los altos índices de cáncer en la región y es cierto, el cigarrillo produce cáncer de pulmón,
pero ¿Por qué en Antofagasta es
muchísimo más frecuente y la primera causa de muerte las mujeres? ¿Y por
qué nos morimos primero por cáncer y no como
en el resto del país, por enfermedades cardiovasculares? ¿Y por qué éste y muchos otros cánceres son
varias veces más frecuentes que en resto
del país? ¿Qué nos hace diferentes?
El famoso galpón de acopio, estructura metálica inerte que ha comenzado a levantarse frente a nuestras narices en el puerto, se transformado en el "ícono" de la contaminación de la perla del norte y ni siquiera hablaremos de los estético de esta estructura, sino de lo que ella representa: transporte, acopio y embarque de concentrados de minerales cobre a granel , (Que no solo contiene cobre, sino una gran cantidad de otras sustancias químicas peligrosos o riesgosas para la salud de las personas) ; el problema real es que su trasvasije de minerales a granel nunca es 100% seguro y siempre ha demostrado filtrarse haca el medio ambiente que lo rodea, generando una odiosa contaminación.
¿Responsabilidad
social empresarial?
Ahora si legislación
fuese más estricta o severa y las
mineras tuviesen que indemnizar los “altos costos” en vidas humanas que genera
esta actividad productiva o pagar los “altos costos”
en tratamientos de los diversos cánceres que ha sufrido la gente de esta región y de la cual solo el estado se hace cargo parcialmente. A lo mejor comenzarían a sacar sus minerales y productos tóxicos por los
lugares más apartados de la población como sea
posible y extremando las medidas de seguridad para evitar contaminar aunque sea
“un poquito”, a lo mejor usando sacos o contenedores cerrados o
herméticos.
¡No les quepa la menor duda!
¡No les quepa la menor duda!
¡Ahí recién comenzaría la verdadera responsabilidad social empresarial!
Mis saludos y mis respetos Dr. Hugo Benítez
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