miércoles, 9 de febrero de 2011

BIEN VALE LA PENA VIAJAR A SALTA


Con motivo de pasar unos días de vacaciones, tuvimos la ocasión de viajar a Salta, en el vecino país de Argentina en el mes de enero y digo tuvimos, porque decidimos junto a in par de amigos ir en caravana  a la vecina ciudad de Salta  en vehículo, un paseo para quienes pueden hacer bastante novedoso y yo diría imperdible. La distancia  es  similar a viajar a La Serena, pero es recomendable alojar en Calama o San Pedro de Atacama.
Como viajamos en caravana,  se  me ocurrió la idea de comprar unos Walkie Tolkie, por lo que fui muy criticado, principalmente las señoras del grupo, incluida mi esposa, pero los cabecillas estuvimos de acuerdo y parecíamos niños chicos,  la verdad es que al poco andar todos estuvieron de acuerdo de lo acertado de la compra, ya que si uno hace este tipo de viajes es muy recomendable y ayuda mucho para mantener la comunicación,  evitar perderse o realizar paradas innecesarias de coordinación, aparte que resulta sumamente entretenido.
En la mañana del sábado en la aduana y  luego de haber cumplido con todos los requisitos, mis colegas y amigos me dicen que no les exigieron el seguro del auto a terceros para Argentina  y ahí me recuerdo que se me quedó en el velador en Antofagasta  le consulto a la aduanera si en San Pedro venderán este tipo de seguros a lo cual me responde, pero si “UD ya salió del País”,  quedé plop ¿? 
Ahí me di cuenta del chiste que significa la aduana  de San Pedro primero con instalaciones muy precarias, ubicada justo en la salida hacia Toconao  y   Jama,  además de la salida hacia Bolivia,  por lo tanto uno se percata que el control allí es prácticamente voluntario, ya que quienes pasan frente a la aduana hacia Toconao  o si regresan de Toconao  a San Pedro pasan sin control.
Obviamente me dirigí a San Pedro y en un ciber, allí logré bajar la copia del seguro de Internet (seguro que nunca me pidieron, pero que es necesario llevar).
  Luego de pasar  por  una altura de poco mas   4800 metros , llegamos algo apunados al paso de Jama , donde los argentinos cuentan con una infraestructura aduanera muy buena, aunque  el trámite, resulta un poco lento.
También allí existe una bencinera  y  recomiendo  rellenar el estanque,  sobre todo vehículos con motor pequeño que en las cuestas consumen mas combustible, continuamos  el viaje rumbo a Salta ,  ahora poco antes de llegar Susques  existe un restorán en el camino y  un pequeño hotel, luego pasamos  por  un enorme Salar  y una cuesta con un paisaje muy hermoso, llegamos Jujuy pero  pasamos por fuera  y  seguimos  rumbo a Salta.


 Esta ciudad  es muy hermosa y esta rodeada por paisaje llenos de vegetación y áreas selváticas, acogen muy bien  a los turistas, es barata o por lo menos bastante mas que Antofagasta, tiene muchos lugares para visitar, dentro y fuera de la ciudad, el teleférico y la subida al cerro, el paseo por la calle Balcarce en la noche donde esta lleno de peñas folclóricas y restoranes es imperdible, la plaza tanbien es bonita, existen muchas artesanías y una feria  artesanal muy atractiva, también  el  paseo al tranque Cabra Corrales, donde ofrecen paseos por el lago en botes, lanchas o catamarán, Canopy,  Rafting, salto en Bungee, salto que me animé a realizar y resultó ser una experiencia interesante y entretenida.



 Está San Lorenzo un lugar muy hermoso, rodeado de bosques y selva  a 15 minutos del centro de Salta, donde nos alojamos en un buen Hotel  y  a muy buen precio.
Bueno luego de una semana en esa hermosa, finalmente regresamos a Antofagasta, el regreso se hizo más corto y  rápido, en  la  aduana Argentina  fue bastante más expedito el trámite de salida,   debo destacar que a 4800metros de altura  y  como a 56 km de San Pedro, estaba una patrulla de Carabineros  de Chile, controlando muy amablemente  a los vehículos que pasábamos por el sector.

Al llegar a la aduana chilena en un “acto” que causa risa nos hacen desarmar todo el equipaje y revisaron todas las maletas y  bolsos  en busca de vegetales y  productos agrícolas, consultando si traíamos hojas de coca, miel  entre otros.
Obviamente no traíamos nada que nos retuvieran. 
 Por qué digo que causan a risa,  porque estábamos alojando en una parcela camino a Toconao,  podríamos habernos ido primero a la parcela a dejar los bultos que uno quisiera que no le controlaran y luego ir a la aduana.
 Entonces de que sirve tener una aduana que permite que uno ingrese al país y se controle cuando a uno le da la gana, podría cualquiera  entrar a San Pedro alojarse en un Hotel,  bajar todo equipaje con todo lo que uno no quiere que le controlen, dejarlo ahí  y luego ir a controlarse en la aduana, con un mínimo equipaje. Para continuar viaje al día siguiente sin problemas.
  ¿Entonces qué sentido tiene  controlar  tan  minuciosamente a los pasajeros que pasan por allí,  si quien quiere burlar el control  lo puede hace muy fácilmente?
¿Solo para justificar el trabajo de los aduaneros y funcionarios del SAG?
¿Por qué siendo San Pedro  de Atacama la puerta de entrada de Argentina y Bolivia,  además de uno de los destinos turísticos más importantes de Chile, tiene unas instalaciones aduaneras tan precarias, por no decir rasca?

Dr. HUGO BENÍTEZ